Casa embrujada

En el ruido de este silencio, 

en las fantasias que llegan volcando sonrisas 

y se cuelan delante de la puerta, 

en esa bisagra algo oxidada, 

en este mismo lugar, 

decido cerrar las puertas.

Porque es conveniente continuar, 

porque es imperativo el seguir, 

no queda mas remedio que caminar, 

no nos quedan mas sueños que amordazar,

y cerrar las puertas de esta casa embrujada,

donde viven mis fantasmas

Tormentos y delirios viven dentro,

deseos prohibidos y algo secos,

muertes en vida y susurros al oido,

De esta casa decido mudarme, 

dejar a su suerte la bella cancion

de amores que fueron y yacen en el olvido

Sin mirar la cerradura oxidada,

tomo lo que me pertenece y me voy,

marcho hacia adelante del futuro

a donde mis pies encuentren su razon

pues de esta casa nada me queda,

solo buenos recuerdos y nada mas

Mucho tiempo he vivido con estos fantasmas,

muchos años atormentando mis presentes,

sin vacilar y sin futuro he sido

un espectro ambulante, dueño de lo acontecido.

Mas hoy despierto a la realidad,

le sacudo las sabanas y la invito a caminar

pues de su suerte yo soy dueño, 

de lo que se olvido ya no quedan recuerdos

Me marcho ahora y dejo el terreno baldío

mientras mirando al cielo sonrio perdido,

tomo algunos sueños y los llevo a mi mochila

los sacare de vez en cuando hasta cumplirlos un dia

Pues de esta casa no quiero ser mas dueño

la pongo en venta y me marcho dispuesto

hacia el amanecer, atardecer o lo que sea

no habran mas fantasmas en mi camino de vuelta