Marchita como las flores del camino
Marchita como las flores que quedan al lado del camino, fugaz como las estrellas que alguna noche ya vimos, simple y sencilla, amortigua su sonrisa con demonios enloquecidos, viene paciente esperando encontrar lo que el camino le ha pedido, busca en su mente la ternura que sabe que existe y cree haber perdido,
Marchita como las flores que quedaron al lado del camino, fragil como el cristal que se va cayendo de las manos de un idiota afligido, espera en la banca de la plaza a un demente con cara de santo, a un mentiroso que pueda darle las emociones anheladas desde hace tanto, espera quieta y apacible, con una sonrisa que no sabe cuanto tiempo pueda mantener, pues en su tiempo no existen dudas, pues en su locura quizas la locura se haya curado, y en otro tiempo quizas, tambien aprendio a dejar de sonreir.
Marchita como las flores que quedaran al lado del camino, nunca lamenta cada sueño perdido, pero espera que las luces cambien de colores para ver si alguna le ilumina, cambia de piel con frecuencia soñando despierta, ¿ a quien esperas que te regale rosas marchitas? ¿ a quien buscas entremedio de esta multitud? Si al cielo miras quizas encuentres lo que no estas buscando, y quizas te encuentre cuando al suelo te quedes mirando, pero para alcanzar el vuelo primero tienes que cepillar tus alas, preparlas y estirarlas para ver si han olvidado como se siente la libertad
Marchita como las flores que van quedando al lado del camino, se van olvidando en las mentes que con frecuencia olvidan lo acontecido, si en algun minuto su demonio se hizo mas fuerte que ella, quizas con frecuencia preguntamos que seria de nosotros sin su propia guerra, pero en ser gentiles y piadosos caemos en el engaño, quizas siendo humanos estamos subestimando la magia del cielo, quizas con solo mirarla no basta, quizas con estirar los brazos y dirigirle un abrazo no basta; pero se marchita con frecuencia y quizas las flores aun tengan el mistico perfume, que en algun momento llego a tener
Marchita como las flores que quedaron al lado del camino, fragil como el cristal que se va cayendo de las manos de un idiota afligido, espera en la banca de la plaza a un demente con cara de santo, a un mentiroso que pueda darle las emociones anheladas desde hace tanto, espera quieta y apacible, con una sonrisa que no sabe cuanto tiempo pueda mantener, pues en su tiempo no existen dudas, pues en su locura quizas la locura se haya curado, y en otro tiempo quizas, tambien aprendio a dejar de sonreir.
Marchita como las flores que quedaran al lado del camino, nunca lamenta cada sueño perdido, pero espera que las luces cambien de colores para ver si alguna le ilumina, cambia de piel con frecuencia soñando despierta, ¿ a quien esperas que te regale rosas marchitas? ¿ a quien buscas entremedio de esta multitud? Si al cielo miras quizas encuentres lo que no estas buscando, y quizas te encuentre cuando al suelo te quedes mirando, pero para alcanzar el vuelo primero tienes que cepillar tus alas, preparlas y estirarlas para ver si han olvidado como se siente la libertad
Marchita como las flores que van quedando al lado del camino, se van olvidando en las mentes que con frecuencia olvidan lo acontecido, si en algun minuto su demonio se hizo mas fuerte que ella, quizas con frecuencia preguntamos que seria de nosotros sin su propia guerra, pero en ser gentiles y piadosos caemos en el engaño, quizas siendo humanos estamos subestimando la magia del cielo, quizas con solo mirarla no basta, quizas con estirar los brazos y dirigirle un abrazo no basta; pero se marchita con frecuencia y quizas las flores aun tengan el mistico perfume, que en algun momento llego a tener
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