Cuando sea que el tiempo quiera
Cuando sea que el tiempo quiera, habre perdido la totalidad de mi corazón, cuando sea el que el tiempo quiera, habre ganado la apertura de una flor en primavera; ya que nos vamos durmiendo entre las rosas, ya que vamos escalando castillos en los cielos, ya que estamos recordando y amando las tristezas, y estamos invadidos del miedo que suplican los mendigos.Y no hay salida o escapatoria para el olvido, no estamos en realidad cediendo ante la negatividad de su palabra, solo estamos dormidos
Cuando sea que el tiempo quiera, habre distorsionado sus palabras en favor de otra musa, cuando sea que el tiempo quiera, habre supuesto nuevas frases y nuevos poemas para los oidos sordos que nunca quieran escuchar; ya que no vamos ganando nada entre las huestes de la muerte, ya que no solidarizo con la apertura de un futuro que no nos incluye, ya que el cielo escupe su bendición directo a mi rostro y quizás el infierno venga a acunarme con los martirios del deseo. Y no hay lamentos que puedan encadenarme a las palabras que nunca dije, no estamos soltando los hilos que nos ataron, sino que nos vamos amarrando mas y mas, a un suelo que abraza y abriga, que calma y desconsuela, que supone y no pisa, que se vuelve llaga y estocada al mismo fin
Cuando sea que el tiempo quiera, habre fallado mil veces mas ante una mujer hermosa, cuando sea que el tiempo quiera, habre mentido otras tantas mas para que ella me ame; ya que no estoy siendo consciente de mis errores otra vez, ya que estoy pensando en su locura y en la mia por separado, ya que su mirada me embobe y me lanze directamente al precipicio una vez mas. Y no hay dudas de que sus palabras serán alimento y agua para el mendigo, y no hay sinceridad agonica en estos días que pueda alcanzar su fe y me vuelva creyente de nuevo, no estoy en realidad en este mundo, nunca estuve, solo permaneci a la altura de un sonido que quería que me salvase, pero no hay salvación para el amor que escudriña entre tus venas, no hay locura que sea lo suficientemente buena para subir y bajar las escaleras del deseo, no hay miedo, no hay ternura, no hay momentos que nos puedan dirigir, cuando sea que el tiempo quiera.
Cuando sea que el tiempo quiera, habre distorsionado sus palabras en favor de otra musa, cuando sea que el tiempo quiera, habre supuesto nuevas frases y nuevos poemas para los oidos sordos que nunca quieran escuchar; ya que no vamos ganando nada entre las huestes de la muerte, ya que no solidarizo con la apertura de un futuro que no nos incluye, ya que el cielo escupe su bendición directo a mi rostro y quizás el infierno venga a acunarme con los martirios del deseo. Y no hay lamentos que puedan encadenarme a las palabras que nunca dije, no estamos soltando los hilos que nos ataron, sino que nos vamos amarrando mas y mas, a un suelo que abraza y abriga, que calma y desconsuela, que supone y no pisa, que se vuelve llaga y estocada al mismo fin
Cuando sea que el tiempo quiera, habre fallado mil veces mas ante una mujer hermosa, cuando sea que el tiempo quiera, habre mentido otras tantas mas para que ella me ame; ya que no estoy siendo consciente de mis errores otra vez, ya que estoy pensando en su locura y en la mia por separado, ya que su mirada me embobe y me lanze directamente al precipicio una vez mas. Y no hay dudas de que sus palabras serán alimento y agua para el mendigo, y no hay sinceridad agonica en estos días que pueda alcanzar su fe y me vuelva creyente de nuevo, no estoy en realidad en este mundo, nunca estuve, solo permaneci a la altura de un sonido que quería que me salvase, pero no hay salvación para el amor que escudriña entre tus venas, no hay locura que sea lo suficientemente buena para subir y bajar las escaleras del deseo, no hay miedo, no hay ternura, no hay momentos que nos puedan dirigir, cuando sea que el tiempo quiera.
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