Déjame ser

Déjame alzarme en la eternidad de un beso suyo o dejame amarla un poquito mas. Déjame abrazarla mientras sueña un nuevo mañana o  ser su compás de nuevo al bailar 

Déjame ser el segundo que pierde buscando la luz en la noche, déjame ser el silencio entre sus gemidos. Déjame ser El Oro que escarba con las manos o simplemente el barro que pisa mientras haya llovido 

Déjame ser un poco de tristeza entre sus mejillas, déjame ser el olvido que ella misma haya olvidado. Déjame ser el faisán que comió en la cena navideña o el respiro agitado después de haber corrido 

Déjame ser el menguante de la luna que le inspira, déjame ser el soneto que ya no escribe nunca. Déjame ser el delirio de su mente mientras divaga o la idea brillante que escribió en su libro.

Déjame ser lo que quieres que sea, pero permíteme ser sin no ser de ella un día. Déjame ser por un segundo a quien le reza en las noches o por último a quien le maldice en las mañanas.

Déjame ser escultor de sueños un poco de magia, déjame ser un poco de todo o mucho de nada. Déjame olvidarme de mi principio absurdo de no verla tanto o  dejar la elocuencia de mi propio llanto 

Déjame ser la valentía que añoro para su vida, déjame ser el pacto que miento y me mienta más cada día. Déjame amarla tanto que pueda desfallecer o déjame morir atado a mi propio amor suicida.

Déjame ser o simplemente no dejes que sea en su vida, porque si no soy en su vida, ¿que soy? ¿Que soy en la Mia?