Clamor de mi existencia

Alimento de la tierra, ablande estas manos que siguen un camino que va directo al cielo. Luz que se ha de filtrar por los cambios que he dispuesto, sueño vivo y presente, satisfacción que una pluma tiene en las manos que te claman 

Alimento de los soñadores, musa que canta para aquellos ojos que solo a ti te miran, dame la entrega oportunas y no melancólica de este corazón. Luz que deviene, luz que ha de quemar el silencio, se gentil con quienes te vienen a buscar para inspirarse

Alimento de los vientos, se frágil y consistente con el cambio, que tu soplo me devuelva la fe que creí perdida y guíame mi camino con tu suave brisa, para continuar por la calidez de una mirada y el pensamiento de una sonrisa que no me hiera 

Mujer, se gentil con este poeta, se la fuente de luz y el alimento de esta lírica, se buena y amable, no derroches al tiempo la sangre que está brotando aquí y ahora, se paciente como la luna, se vivaz como el viento y poderosa como la tierra, se tu misma y aliéntame, se unica y q la vez impredecible, que no puede haber amor más sincero y puro que aquel que no hemos sentido alguna vez.

Seré poeta, seré quien tenga la pluma en las manos u la mirada hacia adelante, seré quien tenga que ser cuando me mires y cuando no lo hagas será con más fuerza, porque sigo aquí, con el clamor de mi existencia y con la vulgaridad de estas palabras